Por Juan Tomás Valenzuela
Un senador Leonelista
amenazó a un ciudadano
de cogerlo por los…
para que no sea corista.
El viejo malabarista,
oriundo de Samaná,
se abalanzó sin piedad
contra el cliente de un banco,
como si este fuera manco,
o como si él fuera un bacá.
¡Ármate maldito negro
si tu quieres que te mate!
Dijo así este guaremate,
apostando al desintegro.
Pero de lo que me alegro
es que la tecnología
pudo fungir este día
como prueba del delito,
enfocando a este maldito
en su abierta felonía.
“Prim es un ente honorable”
dicen de él en el Partido.
Sin embargo el muy bandido,
de forma muy censurable,
muestra un trato despreciable
a sus más fieles devotos
y ahí anda … armando alboroto
a donde quiera que va,
porque para ellos no es ná,
pisar a quien les dá el voto.
Y no es la primera vez
que este viejo petulante
se expresa en forma arrogante
contra los que andan a pie.
Él imita la altivez
del prócer líder y guía,
el mismo que el otro día
celebró su cumpleaños,
obligando a su rebaño
a ir a hacerle pleitesía.
A la descomposición
que nos conduce el Partido,
que ahora dirige el ungido
y que antes lo hacía el león,
encontrarle solución
es compromiso de todos.
El que camine en el lodo,
el que trafique con ajo,
y tó el que enseñe el refajo
en contra de esta nación,
sea socio o no de Rondón,
pueden irse pa’l carajo.
Juan de los Palotes
31 diciembre 2018